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El Currículum Vitae es tu tarjeta de presentación cuando acudes a una empresa de empleo temporal. De hecho, se trata del documento clave que hará que una empresa se interese por ti y te ofrezca la posibilidad de realizar una entrevista para acceder a un puesto de trabajo. Por eso debe estar cuidado al máximo, resultar atractivo y destacar sobre el resto. Y aunque no existen fórmulas mágicas ni modelos únicos para elaborar el CV perfecto, hoy vamos a compartir contigo una serie de consejos que te ayudarán a confeccionar uno adecuado.

Elige una buena foto

Todas los reclutadores quieren saber cómo es la persona que van a entrevistar y quienes digan que no, mienten. Es por ello que todo buen Currículum Vitae debe incluir una fotografía muy cuidada. Elige una fotografía profesional en la que se te vea bien el rostro, esté bien iluminada, no salgan más personas en ella y resulte seria, que no aburrida. Puedes optar por darle un formato circular que hoy en día resulta muy bonito a nivel estético y si te das cuenta, la mayoría de los perfiles de las redes sociales tienden a este formato. Si es la foto que tienes en tus perfiles profesionales (LinkedIn, blogs en los que escribas…) facilitarás tu búsqueda a las personas que se encargan de la selección.

Datos personales

Después de la fotografía, los siguientes datos que deben aparecer son tus datos personales, ya sea al lado o debajo. Elige una manera de mostrarlos que ocupe poco espacio y deja bien claro, aunque parezca una obviedad, tu nombre y apellidos, edad, dirección y correo electrónico. También es aconsejable que incluyas enlaces a tu sitio web o blog si tienes o a tus redes sociales profesionales (LinkedIn, Google +, Twitter…).

Epígrafes claros

Antes de meterte en harina, piensa qué información de tu vida quieres que vean en una empresa de trabajo temporal y, lo más importante, estructúrala en bloques que tengan un epígrafe claro y conciso. Lo más efectivo es incluir una parte de Formación Académica y otra de Trayectoria Profesional. A partir de aquí, hay quien opta por crear otra sección para Másters y Cursos, otra para Idiomas e incluso otra para Datos Varios donde se pueden incluir aficiones, habilidades, tiempo libre…

Experiencia profesional

La mayoría de las empresas darán más importancia a tu experiencia profesional que a tu formación, especialmente si ya has trabajado en el sector al que aspiras. Saber en qué otras compañías has colaborado y con qué cargo puede serte de gran ayuda, de ahí que debas ser muy cuidadoso confeccionando esta información y mostrarla en orden cronológico inverso para que se vean antes tus últimos puestos de trabajo.

Si durante algún periodo de tu vida has trabajo en una empresa que no guarda relación con tu formación o con el sector al que estás aspirando, no te preocupes: los reclutadores prefieren ver todos los trabajos que ha desarrollado una persona que encontrarse con un vacío profesional de años, que siempre causará peor impresión.

Junto al periodo de trabajo (fecha con meses y años) debes incluir el nombre de la empresa en negrita y a un cuerpo un poco mayor, el departamento al que pertenecías en negrita y el cargo que ocupabas.

También es aconsejable que incluyas una pequeña descripción de las funcionas que realizabas. Y un consejo, antes de recurrir a expresiones inglesas que pueden sonar muy cool, apuesta por un lenguaje claro y sencillo en el que expliques qué hacías en cada uno de tus anteriores puestos de trabajo. Será mejor valorado y permitirá que los seleccionadores tengan una idea más clara de tu experiencia.

Y para finalizar, desde Tecnylabor te recomendamos que seas breves y conciso (que tu Currículum nunca supere las 2 páginas de extensión por una cara), que incluya palabras claves relacionadas con el sector y que dejes las habilidades, idiomas, informática e intereses para el final. Apuesta por un sistema de diagrama de barras o estrellas para mostrar lo experto que eres en cada una.